Las nuevas tecnologías ofrecen nuevas formas de expresar esta democracia. Sin embargo, se ciernen dos amenazas: por un lado, la desigualdad de los ciudadanos frente a la tecnología digital, conocida como brecha digital; y, por otro, el riesgo asociado al uso de datos públicos, conocido como datos abiertos.

Creo en el genio del pueblo siempre que los medios de comunicación no lo atonten y lo conviertan en una masa descerebrada.

La democracia ya no es un compromiso con la igualdad para todos, sino con garantizar que todos puedan ser diferentes, al tiempo que reciben el mismo trato. Ya no es una exigencia de libertad de expresión, sino de autoexpresión para no hundirse en el agujero negro de la globalidad.

El símbolo más excelente del pueblo es el adoquín. Caminas sobre él hasta que te cae en la cabeza.

La democracia es el gobierno del pueblo que ejerce su soberanía sin trabas.

El azar nunca ha satisfecho las esperanzas de un pueblo que sufre.

Los suizos han demostrado de forma impresionante que existe una diferencia entre lo que se dice en la taberna y lo que piensa la gente.

La democracia debe garantizar a los más débiles las mismas oportunidades que a los más fuertes.

La democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.

Si queremos un cambio real, si queremos mayor autenticidad y transparencia, tendrá que venir desde abajo, a través de nuestras demandas, nuestra voz, pero también a través de nuestras decisiones de consumo. Todos tenemos el poder: ¡el poder de nuestras carteras!